¿Qué pasos hay que seguir tras una inseminación artificial? Conoce aquí cuáles son las pautas que se deben tener en cuenta.
Tras someterse a un tratamiento de inseminación artificial son muchas las dudas planteadas por las parejas en consulta en relación a si el tratamiento puede alterar su ritmo de vida diaria. La inseminación requiere de unos días de espera antes de realizar la prueba de embarazo, que determinará si el proceso ha sido exitoso. Son, precisamente, esos días posteriores a la inseminación los que mayor incertidumbre generan entre los pacientes. Para facilitar la espera y despejar dudas os contamos cómo actuar sin intervenir negativamente en los resultados del proceso:
1. Después de la inseminación artificial la paciente debe guardar reposo durante unos 10 minutos, en consulta. Inmediatamente después podrá continuar con su vida diaria normal, trabajar e incluso hacer deporte.
2. Como decimos, practicar deporte de baja o media intensidad unos 30 minutos al día también es posible y positivo.
3. Es importante mantener una alimentación saludable, evitando el consumo de carnes poco hechas y lavando bien la fruta y los vegetales previamente. En realidad la dieta recomendable es aquella que seguiría cualquier mujer embarazada. Para evitar infecciones como la Listeria no se aconseja consumir leche no pasteurizada y limitar la ingesta de pescado azul.
4. No se recomienda tomar ningún tipo de medicación que no esté indicada para el embarazo. Es importante, por tanto, consultar a tu médico cualquier duda relacionada al respecto.
5. En lo que respecta a las relaciones sexuales, puede ayudar a la concentración de espermatozoides si se mantienen el mismo día de la inseminación. No hay ningún problema en que la pareja cuente con una vida sexual activa.
El proceso de inseminación artificial permite a la paciente seguir con su vida habitual de forma inmediata, sin que sus costumbres puedan repercutir o alterar el resultado final. En lo que respecta al proceso en sí no es, por lo general, doloroso. Algunas pacientes sufren molestias leves causadas por las contracciones del útero propias del tratamiento, pero no duran más de 10 minutos. En algunas ocasiones la ovulación puede acumular líquido en el abdomen y la paciente puede experimentar una sensación parecida a tener gases.
Síntomas después de someterse a una inseminación artificial
Algunas pacientes notan una molestia parecida a la regla pero nada más allá. Otro de los síntomas que más comunes es un leve sangrado (sangrado de implantación) y un aumento de la sensibilidad en las mamas. Esto puede deberse al embarazo en sí, o al suplemento de progesterona administrado durante el proceso. La progesterona se utiliza para preparar, lo mejor posible, al endometrio para propiciar la implantación. La dosis que se administra es mínima y se aplica desde el momento de la inseminación hasta la prueba de embarazo.
En general el proceso de inseminación artificial supone una intervención rápida e indolora que no requiere de reposo posterior ni de limitaciones sobre determinadas actividades cotidianas. Es uno de los motivos por los que muchas parejas deciden someterse a este tratamiento a la hora de buscar un posible embarazo. Conociendo en detalle en qué consiste la inseminación artificial, ¿sería una de tus opciones para concebir?
Más información sobre cómo actuar después de la inseminación artificial en
http://urh.es/es/despues-de-la-inseminacion-artificial/
Dra. Sylvia Fernández-Shaw Zulueta – Directora de URH García del Real
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